¿Qué es la ecografía?
La ecografía abdominal es una prueba de imagen o examen diagnóstico que se usa para ver las vísceras de la cavidad abdominal: hígado, vesícula biliar, bazo, páncreas y riñones.
¿Cómo funciona una ecografía?
El ecógrafo emite ondas sonoras de alta frecuencia que se reflejan en las estructuras del cuerpo y crean una imagen la cual permite reconocer las vísceras del abdomen.
Estando tumbado se aplica un gel conductor transparente sobre la piel del abdomen, lo que ayuda a transmitir las ondas sonoras y luego se pasa una sonda llamada transductor sobre el abdomen.
Al variar la posición o modificar la respiración se pueden identificar estructuras de forma dinámica.
¿Se precisa preparación?
La preparación es variable. A veces es aconsejable no comer ni beber nada durante varias horas antes del examen.
¿Es molesta la exploración?
Es totalmente indolora. Sólo se siente la pequeña molestia de la presión del terminal y un poco de frio o humedad por el gel.
¿Para qué se realiza una ecografía?
- Para buscar la causa de un dolor abdominal
- Para buscar la causa de una infección renal
- Para diagnosticar una hernia
- Para diagnosticar y controlar tumores
- Para buscar cálculos en la vesícula biliar o el riñón
- Para valorar el origen de una fiebre no filiada
¿Qué se puede ver en una ecografía abdominal?
- La existencia de una hernia de pared abdominal o de la ingle
- La presencia de piedras en la vesícula (cálculos) o en el riñón
- Valorar un aneurisma de aorta abdominal
- Se puede ver el apéndice y su posible inflamación
- Problemas renales y de sus vías (hidronefrosis)
- Valorar el tamaño del bazo (esplenomegalia)
- La presencia de una inflamación del páncreas (pancreatitis)
¿Tiene algún riesgo?
No. No existe riesgo alguno documentado.
A recordar
- No tiene ningún problema
- Es una prueba rápida y sencilla
- Es de gran ayuda para llegar a un diagnóstico fiable
- Es de gran interés para planear un tratamiento más correcto
